La guerra entre Israel e Irán continúa incorporando nuevos factores internacionales que pueden hacer estallar todo por los aires de un momento a otro -más si cabe-. Uno de ellos sería la inclusión de EEUU en el conflicto de una manera totalmente activa, algo con lo que Trump lleva amenazando a Teherán desde hace unos días. Sin embargo, y de acuerdo con sus últimas declaraciones, "nadie sabe" qué decisión va a tomar respecto a si bombardeará Irán o no.

En cualquier caso, desde el pasado martes, el presidente estadounidense anunció abiertamente saber en qué lugar se encuentra el ayatola Alí Jamenei, aunque descartó querer asesinarlo "por ahora". Esto sin duda sería una escalada irrefrenable en el conflicto, que raramente podría solucionarse.

Entre bombardeos, muertes de civiles y amenazas de unos y otros, se han producido algunas declaraciones por parte del líder iraní, en las que asegura contar con sus capacidades nucleares intactas pese a los ataques israelíes, y contradiciendo a la OIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica). 

Pese a ello, la llave podría tenerla EEUU, que han asegurado contar con la bomba "antibúnker", capaz de traspasar cualquier refugio o instalaciones nucleares bajo tierra, algo que también aseguró Irán hace pocos días. Sin embargo, la estadounidense parece ser realmente letal en este sentido. 

Según apuntan desde Washington, su 'Massive Ordnance Penetrator' (MOP GBU-57), es capaz de perforar montañas y penetrar más de 60 metros antes de explotar, pero que cuenta sin embargo con un gran peso, únicamente soportable por los bombarderos estadounidenses B-2.

Aunque por el momento EEUU no parece tener intención de utilizarlo de forma inmediata -esto puede cambiar de un momento a otro-, la administración Trump ya ha dejado claro que cuenta con el potencial para hacerlo con su bomba "destructora de búnkeres".

Israel tiene acceso a ellas

Hablamos de una bomba de unos 6 metros de largo y 13,6 toneladas de peso, debe ser lanzada a una distancia de unos 15 km de altura y cuenta con la posibilidad de ser redireccionada posteriormente. Cuando penetrado en el suelo, el detonador de la bomba activa la ojiva. De acuerdo con lo apuntado por Israel -que anima a EEUU a utilizarla-, Irán contaría con uranio enriquecido (necesario para fabricar estas armas) en instalaciones bajo tierra, por lo que consideran clave que Washington haga uso de esta bomba.

Y esta petición no ha sido denegada abiertamente. De hecho, el excoronel del Ejército estadounidense Steve Ganyard ha explicado en declaraciones a la cadena de televisión ABC que fue "especialmente diseñada para ser utilizada contra objetivos en Irán y otros lugares -como Corea del Norte- que desarrollan este tipo de armamentos en instalaciones subterráneas", que cuentan con grandes muros de hormigón.

"Están reservadas para lugares como Irán y Corea del Norte porque no necesitas nada que explote a tanta profundidad en condiciones normales", ha aseverado, antes de apuntar a que cuenta con unos 2.200 kilogramos de explosivos. "No sería una explosión masiva, sino que generaría algunos escombros, pero nada más", ha añadido.

Israel cuenta con acceso a las bombas GBU-57, pero en caso de querer utilizarlas, necesitarían que el bombardero estadounidense B-2 llegará a Israel, un viaje que tardaría en realizar unas 15 horas.