La amenaza de una posible Tercera Guerra Mundial sigue muy latente. Desde la televisión estatal rusa, destacados propagandistas pro-Putin han vuelto a pedir un ataque nuclear sobre Londres, señalando a la capital británica como un objetivo legítimo en represalia por el apoyo militar de Reino Unido a Ucrania.

Vladímir Solovyov, uno de los principales voceros mediáticos del Kremlin, ha declarado recientemente en un programa televisivo que "los objetivos nucleares incluían a Londres, así como a Finlandia y Suecia", informa Express. Esta alarmante declaración se ha producido tras la conversación telefónica que mantuvieron el lunes el presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo estadounidense, Donald Trump.

Según el asesor presidencial ruso Yury Ushakov, Putin expresó su indignación ante el reciente ataque ucraniano durante las celebraciones del 9 de mayo, cuando dignatarios extranjeros asistieron al desfile militar conmemorativo de la victoria soviética en la Segunda Guerra Mundial. "Nuestro presidente enfatizó la importancia del reciente aniversario [...] y recordó que Rusia había anunciado un alto el fuego de tres días antes de la celebración", dijo.

"Después de eso, en las primeras horas de la mañana... Ucrania lanzó 524 drones y misiles Storm Shadow contra Rusia, la mayoría de los cuales estaban dirigidos a Moscú. Prácticamente todos fueron derribados", añadió.

Aunque los expertos señalan que los misiles Storm Shadow, de fabricación británica, tienen un alcance de aproximadamente 155 millas, insuficiente para llegar a Moscú desde territorio ucraniano, los propagandistas rusos insisten en que estos ataques representan una "declaración de guerra".

"Planes británicos, misiles británicos, un ataque contra Moscú. ¿Hasta cuándo vamos a aguantar a estos sinvergüenzas?", ha planteado Igor Markov, también presente en el programa. "Es por eso que digo que deberíamos apuntar a Londres", ha continuado.

El presentador incluso sugiere una "explosión nuclear de demostración sobre Londres", que causaría una devastadora tormenta electromagnética, paralizando los servicios esenciales del país. Rechazando un ataque que provocara un maremoto que "ahogaría a Gran Bretaña", propuso esta alternativa como una forma más "precisa" de represalia.

Finalmente, en tono despectivo, Solovyov ha calificado a Reino Unido como un "estado miserable de gente sin barbilla, pantanoso", escalando aún más el tono beligerante de la retórica rusa.

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