China y EEUU continuarán este domingo en Ginebra sus negociaciones comerciales para frenar la guerra arancelaria
La Casa Blanca advierte que no habrá rebajas unilaterales sin concesiones de Pekín.

Las delegaciones de China y Estados Unidos reanudarán este domingo en Ginebra sus conversaciones comerciales, en un intento por reducir la tensión en la guerra arancelaria iniciada por Washington, después de haber mantenido una primera reunión este sábado.
El viceprimer ministro chino, He Lifeng, y el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, encabezan las delegaciones en esta primera ronda de diálogo desde que el presidente Donald Trump impusiera aranceles generalizados, que afectan en particular a las exportaciones chinas. Según confirmó la agencia oficial Xinhua, las conversaciones, que comenzaron el sábado en un entorno reservado, continuarán el domingo, sin que hasta el momento se hayan dado a conocer detalles específicos.
Antes del viaje, Bessent ya adelantó que no se esperaba alcanzar un acuerdo inmediato, sino más bien establecer las bases de una posible resolución. En paralelo, Trump ha insinuado que estaría dispuesto a reducir del 145% al 80% los aranceles impuestos a China, aunque la decisión final quedará en manos de su equipo económico.
Desde Pekín, se califica este contacto como un "paso importante", mientras que la directora de la OMC, Ngozi Okonjo-Iweala, lo describió como "positivo y constructivo", alertando no obstante sobre el impacto potencial de un desacoplamiento entre las dos mayores economías del mundo.
China, por su parte, ha respondido a las medidas de Washington con aranceles del 125% a productos estadounidenses. No obstante, algunos analistas como Bonnie Glaser o Lizzi Lee consideran que podría alcanzarse un acuerdo provisional para suspender parte de los aranceles mientras continúan las negociaciones.
El encuentro se produce en un contexto económico mixto: mientras las exportaciones totales de China aumentaron en abril más de lo previsto, las dirigidas a EEUU registraron una fuerte caída. La Casa Blanca, sin embargo, advierte que no habrá rebajas unilaterales sin concesiones concretas de parte de Pekín.