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Ni la Mona Lisa ni las Meninas: sentencia que esta es la pintura más detallada de la historia y guarda un gran mensaje secreto

Ni la Mona Lisa ni las Meninas: sentencia que esta es la pintura más detallada de la historia y guarda un gran mensaje secreto

Es una pintura llena de detalles y precisiones que el autor ha incorporado para que cada trazo parecza tener un propósito y significado únicos.

La Mona Lisa pintada por Leonardo da Vinci en el Museo del Louvre de Paris.Getty Images

Entre las joyas del arte renacentista, una obra flamenca del siglo XV sigue desconcertando a expertos y amantes del arte. Se trata de La Virgen del canónigo Van der Paele, pintada por Jan Van Eyck en 1436. Esta pieza, considerada una de las más meticulosas de su época, oculta un mensaje que solo unos pocos han logrado descifrar.

Según un análisis compartido por 'Jeferson Nasa' en Modena Volta Pagina, esta pintura está llena de detalles y precisiones que el autor ha incorporado para que cada trazo parecza tener un propósito y significado únicos. El protagonista es el canónigo Joris van der Paele, retratado arrodillado ante la Virgen María y el Niño Jesús

A primera vista parece saludable, pero Van Eyck habría incluido pistas sutiles sobre su verdadero estado. El clérigo presenta arterias temporales inflamadas, pérdida de pelo cerca de la oreja y una mirada divergente, lo que serían síntomas de la arteritis temporal, "una de las pocas enfermedades que pueden causar ceguera". El libro y las gafas que sostiene el clérigo acentúan esta interpretación.

  Van Eyck - Virgen del canónigo Van der Paele, 1434 (Brujas).Hugo Maertens (Wikimedia Commons)

Arrepentimiento y tradición

Además, "Joris está de rodillas en oración, como si buscara el perdón", añade el usuario, lo que puede leerse como una confesión en busca de redención. En el siglo XV, la ceguera se relacionaba con castigos divinos por faltas morales, y este podría ser un mensaje codificado de arrepentimiento.

Otro detalle fascinante es la silueta de un hombre reflejada en la armadura de San Jorge. Se cree que es el propio Van Eyck. Está situado a un metro, la distancia ideal para permitir que el espectador se detenga, lo que sugiere una invitación a contemplar profundamente la escena.

La pintura también es un ejemplo de la tradición religiosa flamenca. Según La Finestra Sull'Arte, la obra "representa una estructura teológica compleja basada en diferentes niveles de interpretación y significado". Junto a la Virgen, aparecen San Donaciano y San Jorge, portando reliquias reales de la iglesia de Brujas. Van Eyck no solo glorificó al donante, sino que también rindió homenaje al duque Felipe el Bueno.

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