"La gran mayoría de la población está inflamada y no lo sabe". Así lo afirmó la nutricionista Sandra Moñino en Herrera en COPE, en una intervención en la que dio las claves sobre cómo afecta la inflamación la organismo.

Muchas personas asocian la inflamación a tener la barriga hinchada o a sufrir más gases, pero hay otros síntomas que pueden evidenciarla, como son la diarrea o el estreñimiento.

Sin embargo, también existen otras señales que quizá cuesta más asociar con una posible inflamación, aunque ésta sea su causa.

Entre estas señales que pueden pasar más desapercibidas estarían, por ejemplo, un dolor constante de cabeza, alteraciones en la piel o notarse sin energía por las mañanas.

En esta lista podrían incluirse aumentos o pérdidas de peso drásticas sin explicación aparente o vómitos.

"La gran mayoría de la población, por la alimentación que llevamos hoy en día y el estilo de vida estresante y sedentario, sufrimos inflamación crónica y no lo sabemos", insistió la nutricionista.

Ante cualquier duda o sospecha de que se pueda padecer, lo ideal es siempre consultar con un profesional de la salud que pueda hacer un estudio individualizado del caso y pautar así un tratamiento personalizado.