Un país de la OTAN dice "basta" y lanza el aviso más crudo: "Si Rusia viene, nosotros llevaremos la guerra a Rusia"
"Necesitamos actuar en los primeros minutos y horas", ha añadido.

A pocas semanas de la próxima cumbre de la OTAN, crecen las preocupaciones entre los funcionarios europeos sobre la posibilidad de que los nuevos y ambiciosos objetivos de capacidad militar de la alianza no sean suficientes para disuadir a Rusia de "probar" la reacción de la OTAN en caso de un ataque a uno de sus miembros en los próximos tres a cinco años.
Según altos cargos europeos, el presidente ruso, Vladímir Putin, estaría percibiendo a Europa como "más débil de lo que es realmente", mientras que la Casa Blanca no ha terminado de asumir la gravedad de la amenaza rusa, informa Defense One.
Durante la reciente conferencia de seguridad GLOBSEC, el ministro de Asuntos Exteriores de Estonia, Margus Tsahkna, reveló que los miembros de la OTAN están discutiendo no solo sobre el aumento de los presupuestos de defensa, sino también sobre una nueva doctrina que contempla contraataques inmediatos dentro del propio territorio ruso.
"El nuevo concepto es que si Rusia viene, llevaremos la guerra a Rusia. De eso estamos hablando. Necesitamos actuar en los primeros minutos y horas", afirmó Tsahkna. Esta estrategia se basa en los planes de defensa regional aprobados en 2023, los cuales otorgan mayor autoridad al general estadounidense Christopher Cavoli, comandante supremo aliado en Europa.
La cumbre de este año irá un paso más allá, estableciendo capacidades concretas que Europa deberá desplegar ante un conflicto. "Ahora tenemos objetivos de capacidad para este concepto", explicó Tsahkna.
El peligro podría llegar pronto
Un funcionario de la OTANsubrayó la urgencia del momento: "No tenemos 19 años para esperar. Prepárense para partir ahora". Esa urgencia se refleja en la declaración de otro alto funcionario militar europeo: "Todos coincidimos en que necesitamos reforzar la disuasión, porque Rusia podría intentar poner a prueba nuestro Artículo 5 en tres a cinco años. Construir un edificio en nuestro Ministerio de Defensa lleva seis años".
Karel Řehka, jefe militar de la República Checa, destacó que los nuevos objetivos "están realmente impulsados por la amenaza, pero también por la innovación".
En la cumbre, se espera que se adopten compromisos de gasto nacional en defensa equivalentes al 3,5% del PIB, además de una inversión adicional del 1,5% anual en infraestructura. "Estas capacidades, que abarcan defensa aérea, aviones de combate, tanques, drones, personal y logística, entre otras, mantendrán nuestra disuasión y defensa fuertes y a nuestros mil millones de habitantes seguros", declaró el secretario general de la OTAN, Mark Rutte.