Rusia muestra su firmeza frente a Ucrania y afirma que no le permitirá recuperar las fronteras de 1991
Exteriores acusa a Kiev de atacar un mercado el Primero de Mayo, dejando siete muertos. Habla de un "instinto caníbal de destruir todo lo ruso" y promete que la soberanía de su vecino no volverá a ser la internacionalmente reconocida.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia ha denunciado que Ucrania presuntamente ha atacado el mercado de la ciudad de Oleshky, de unos 25.000 habitantes. La agresión, detalla, se produjo con drones FPV y causó víctimas. "Rusia no permitirá que Ucrania recupere las fronteras de 1991", denuncia.
La Federación Rusa se refiere, así, a que impedirá que se restablezca la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas de 1991, indicó el servicio de prensa ministerial, citado por la agencia Ukrainian National News (UNN). La exigencia de los de Vladimir Putin es quedarse con Crimea, anexionada en 2014, y con cuatro regiones del este (Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón), parcialmente ocupadas en este momento.
Las fuerzas ocupantes de Ucrania, que acometen su "operación militar especial" desde el 24 de febrero de 2022, afirman que las Fuerzas Armadas de Ucrania presuntamente atacaron la zona civil, en una ciudad situada en la parte ocupada de la región de Jersón, en la mañana del 1 de mayo, hacia las 9:30 horas. Había gente haciendo compras en el momento de los hechos, dicen. Según datos preliminares rusos, más de 20 personas resultaron heridas y siete fallecieron.
Tras los primeros ataques, que ya habían causado bajas, "el enemigo realizó una segunda incursión con vehículos aéreos no tripulados, durante la cual remató sin piedad a los rescatistas y supervivientes y atacó" nuevamente, denuncia Moscú.
El departamento de Política Exterior también denunció que este ataque se llevó a cabo deliberadamente durante un día festivo, lo que supuestamente hizo para maximizar el número de víctimas y heridos entre la población civil.
Al mismo tiempo, afirmó que la autodenominada "junta neo-Bandera" ucraniana supuestamente demostró una vez más su incapacidad para negociar, en paralelo a lo que pasa en las ciudades y en el frente de batalla. El proceso, auspiciado por EEUU, está hoy estancado, con constantes reuniones que por ahora no dan resultado.
"Es evidente que tras las vanas e infundadas afirmaciones del régimen de Kiev y las fuerzas que lo apoyan en Occidente, a favor de la supuesta restauración de Ucrania dentro de las fronteras de 1991, se esconde el instinto caníbal de destruir todo lo ruso. Es evidente que Rusia jamás permitirá que se implemente tal escenario", concluye.