El jefe de la empresa invita a sus 180 empleados a cenar, pasa los 6.000 euros de la cuenta como gasto profesional y acaba en juicio y rompiendo su cuenta de ahorro
La empresa había pasado el coste a "gastos de representación" porque quería premiar a los empleados de un centro sanitario. Los jueces consideran que ahora se debe de devolver todo el dinero.

Una cena para 180 empleados que terminó costando 6.000 euros. Finalmente, la cuenta fue más alta de lo que aparecía en el ticket que fue entregado en la mesa. Los gastos fueron derivados finalmente a nombre de la empresa, a una sección llamada "gastos de representación". Sin embargo, según el Tribunal de Cuentas de Trento (Italia) la cena no tenía nada que ver con organizaciones de la entidad con lo que esta deberá devolver el dinero.
Esta reunión entre directivos y empleados se produjo en el año 2019, la cuenta fue de un total de 5.940 euros, o aproximadamente 33 euros por persona. Según los jueces, el "gasto de representación" debe servir para ayudar a la empresa para mejorar la imagen o el funcionamiento de la misma, no para celebraciones internas con lo que se deberá reingresar lo adjudicado en esa cena.
La empresa es un centro de salud y el abogado del exdirector intentó justificar el pago asegurando que el trabajo en las residencias de ancianos es muy duro y que momentos como estos sirven para motivar al personal. "Existen varios desafíos a la hora de reclutar y retener a los cuidadores de personas mayores. El objetivo final era garantizar tanto el nivel numérico como el cualitativo de los operadores responsables de la asistencia", explicó.
Además de la cena, el juzgado también cuestionó algunas prácticas del centro de salud como 3.680 euros en insignias de oro para quienes cumplieron 30 años de servicio, 300 euros en cuencos para regalar a los jubilados, 100 euros en flores para la cena y 109 euros en certificados de mérito. Entre pitos y flautas, la cantidad requerida al exdirector fue finalmente de 10.130 euros en total.