Un grave error de la oficina de correos acaba con el cuerpo de un perro pudriéndose dentro de un paquete durante una semana
El cuerpo del animal había sido enviado para que se le realizara una autopsia, que no se pudo realizar correctamente porque el cadáver estaba podrido.

Un insólito error logístico de Posti ha provocado una situación dramática para la dueña de un perro, quien vio cómo el cuerpo de su mascota fallecida fue dejado en tránsito durante siete días sin llegar a su destino final, una autopsia en Helsinki. La historia de la perra Jörö, un cachorro de border collie, ha conmocionado a los involucrados, que no pueden entender cómo un paquete pudo ser tan descuidadamente manejado.
Heidi Suikkanen, dueña de Jörö, explicó en conversación con Iltalehti que fue la clínica veterinaria quien le informó sobre el problema con el envío. El cuerpo de Jörö fue enviado desde Kouvola hasta el Hospital Veterinario de la Universidad de Helsinki el mismo día en que la perra falleció, con la esperanza de que se esclareciera la rara enfermedad que la mató. Sin embargo, el paquete que debía ser entregado al día siguiente, según los estándares de Posti Express, no llegó a tiempo. El paquete pasó una semana viajando, sin que nadie informara a los responsables del envío sobre el retraso.
Cuando finalmente el paquete llegó al hospital el 13 de mayo, el cuerpo de Jörö ya estaba irremediablemente deteriorado, impidiendo realizar la autopsia. Según el veterinario a cargo, Katariina Palmu-Kyötikki, el olor a descomposición era tan fuerte que se hizo evidente que el paquete había sido mal gestionado desde el principio. El hecho de que el cuerpo permaneciera durante días en malas condiciones plantea serias dudas sobre la eficiencia de los procesos internos de Posti, especialmente cuando se trata de envíos de naturaleza tan delicada.
Este error no solo ha ocasionado una pérdida irreparable para la dueña, sino que también ha generado complicaciones en su proceso de seguro. La falta del informe de autopsia podría retrasar la compensación que Suikkanen esperaba recibir, pues el diagnóstico médico era crucial para formalizar el reclamo.
Desde Posti, Laura Inttilä, responsable de la producción de servicios, lamentó el incidente y explicó que la demora se debió a la necesidad de verificar detalles específicos del envío, aunque reconoció que el manejo del paquete no cumplió con los estándares requeridos. La empresa ha prometido revisar sus procedimientos para evitar que situaciones como esta se repitan, aunque la directora aseguró que nunca había presenciado un caso similar en su carrera.
"Según nuestras investigaciones, esto es lo que ha sucedido aquí. Ahora revisaremos a fondo nuestros métodos operativos con respecto a las transmisiones especiales y haremos todo lo posible para evitar que vuelvan a suceder cosas similares", recoge Intitilä. Este suceso ha puesto en evidencia las fallas en los servicios de mensajería, especialmente cuando se manejan envíos tan sensibles como el transporte de animales fallecidos.