Nunca más tirarás unas tijeras: el trucazo de 'afilador' con un elemento que todos tenemos en la cocina
Son cuatro pasos muy sencillos.
Si alguna vez has intentado hacerte la manicura y descubierto que tus tijeras desgarran más de lo que cortan, no eres el único al que le ha pasado. Pero antes de desecharlas, prueba a afilarlas con este sencillo truco que puedes hacer en casa con algo que seguro tienes en tu cocina: papel de aluminio.
La técnica es fácil, rápida y gratuita. Solo tienes que seguir estos cuatro pasos.
- Dobla el papel de aluminio. Dóblalo varias veces hasta formar una capa de unos milímetros de grosor o arrúgalo hasta formar una bola compacta.
- Córtalo de forma estratégica. Usa las tijeras de uñas como si estuvieras cortando papel normal. Realiza entre 10 y 15 cortes con movimientos firmes y parejos para asegurar un afilado uniforme.
- Prueba las tijeras. Corta una hoja o una uña falsa para comprobar si las cuchillas funcionan mejor.
- Limpia las tijeras. Una vez hayas comprobado que funcionan bien, pasa un paño seco para eliminar residuos de aluminio.
Este método funciona porque el papel de aluminio actúa como un abrasivo suave, eliminando pequeñas imperfecciones en las hojas. Es, en esencia, una "exfoliación" para las tijeras, sin necesidad de un afilador profesional. Y lo mejor es que también sirve para otro tipo de tijeras, como las de cocina u oficina. En cambio, no se debe usar con cuchillos de precisión.
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