Un hombre de 40 años, residente en Medesano (Italia), fue víctima de una estafa tras realizar dos transferencias bancarias por un total de 19.000 euros para comprar un coche usado anunciado en un supuesto sitio web de confianza. El vehículo, que, para más inri, era el coche de sus sueños, fue ofrecido a un precio muy atractivo, lo que reforzó su interés y motivó la compra.

El anuncio se encontraba en una página que parecía legítima, vinculada a un concesionario de confianza. Convencido por la presentación profesional del portal y el contacto fluido con el vendedor, el hombre no dudó en negociar por teléfono y mensajes, aceptando pagar el total solicitado mediante transferencia bancaria.

Tras completar el pago, se desplazó con ilusión al concesionario indicado para recoger el vehículo. Sin embargo, al llegar, le informaron que el vendedor no trabajaba allí y que el coche nunca había formado parte del catálogo. Fue entonces cuando se dio cuenta de que la página del concesionario había sido clonada.

El gerente del establecimiento confirmó que el sitio había sido falsificado y que no tenían relación con la venta anunciada. El comprador, estupefacto y ya sin opciones, regresó a casa y denunció el caso a los Carabineros, proporcionando los detalles del fraude, incluidos los justificantes de pago y las conversaciones mantenidas.

La investigación llevada a cabo por la comisaría de Medesano permitió rastrear el flujo del dinero transferido. Gracias al análisis de los movimientos bancarios y las líneas telefónicas utilizadas, los agentes lograron identificar al presunto autor, un italiano de 44 años con antecedentes por estafas similares.