¿Dios es conservador o progresista?
¿Tiene sentido decir de los papas que son progresistas o conservadores si no tiene sentido aplicar el mismo apelativo al Dios que representan?

La sucesión de papas conservadores y progresistas me tiene la cabeza loca. Una de dos: o el Espíritu Santo no tiene nada que ver en la elección del sucesor de San Pedro y estamos ante un asunto puramente humano y terrenal, o Dios sí elige quién va a ser su representante en la Tierra pero es un señor de opiniones políticas cambiantes. En ambos casos Dios no sale muy bien parado, al menos en cuanto a su omnipotencia e inmutabilidad. La doctrina católica no deja lugar a dudas al respecto: los cardenales que se sentaron esta semana entre frescos de Miguel Ángel fueron meros instrumentos utilizados por el Espíritu Santo para que la fumata blanca apuntara al candidato seleccionado por Dios Padre. Fue la Tercera Persona de la Santísima Trinidad la que movió sus manos mientras escribían el nombre en la papeleta.
Pero entonces… ¿por qué las tres primeras fumatas negras? ¿Acaso Dios no sabía quién iba a ser el sucesor de Francisco desde el principio de los tiempos? ¿Acaso no sabe ya quién y cuándo sucederá a León XIV? ¿Lo de las tres primeras votaciones fallidas fue para subir las audiencias en televisión y mantener el hype en todo lo alto? ¿Y las conversaciones entre los purpurados eran del tipo “¿tú a quién crees que ha elegido Dios?”, o más bien eran “nos conviene votar a éste o nos conviene votar al otro”? ¿Creen los propios prelados en Dios? ¿Creen en Dios los tertulianos que, diciéndose católicos, han estado comentado la elección del papa durante estos días como si fuera una decisión humana contingente? ¿Queda alguien que crea en Dios por aquí cerca? ¿Cree Dios en Dios?
Y si Dios es progresista, ¿anduvo refunfuñando cabreado durante el papado de Benedicto XVI y terminó haciendo que dimitiera aunque estuviera vivo? ¿Está feliz ahora? Y si Dios es conservador, ¿permitió los comentarios tolerantes con el colectivo LGTBIQ+ del papa Francisco como permite Felipe VI la prórroga sine die del fallo del Tribunal Constitucional sobre la Ley Trans? ¿Tiene sentido decir de los papas que son progresistas o conservadores si no tiene sentido aplicar el mismo apelativo al Dios que representan? Y si sí tiene sentido decir de Dios que es progresista o conservador, ¿cómo explicar los papados en donde el papa no coincide con la orientación de Dios? ¿Es como cuando Mitterrand presidía la República Francesa pero Chirac era el primer ministro?
Al papado le ha pasado… no sé… como a Eurovisión. Hace décadas era un suceso de primera importancia, después fue decayendo hasta pasar desapercibido, y de pronto, sin que las causas estén claras, volvió a ser un bombazo mediático. Si algún día la Humanidad conforma un único país, las elecciones a la presidencia mundial no tendrán mayor cobertura mediática que la que ha rodeado al bueno de Robert Prevost. No tengo la menor intención de comparar a Melody con León XIV, pero me huelo que, igual que Eurovisión revivió al convertirse en un show donde la música es una mera excusa, el Vaticano ha revivido gracias a convertir a Dios en un mcguffin de las estrellas pop que son los últimos papas —algunos conservadores, otros progresistas, algunos amantes de la PepsiCola, otros de la Coca-Cola—.