Advierten del efecto retardado de incluir este fruto seco en el desayuno: científicos aseguran que mejora el rendimiento mental durante la tarde
Según un estudio.

Hay personas que tienen incorporado el hábito de incluir un puñadito de frutos secos en el desayuno y, según una investigación, puede ser muy buena idea.
Un estudio de la Universidad de Reading, como cuenta JN, ha demostrado que aquellos que comen frutos secos por la mañana "fueron capaces, horas después, de tener tiempos de reacción más rápidos ante tareas complejas, de razonamiento y de pensamiento a lo largo de la tarde".
En concreto, se constató que el efecto de comerlos en la mente no era inmediato, sino aproximadamente a las seis horas de haberlos ingerido.
Para esta investigación se estudió a 32 adultos, de entre 18 y 30 años que fueron analizados en dos momentos diferentes: cuando ingirieron 50 gramos de nueces trituradas mezcladas con muesli y yogur y cuando desayunaron lo mismo, pero sin esos frutos secos.
Se les hizo pruebas cognitivas dos, cuatro y seis horas después, y también un mapeo de sus funciones cerebrales, "registrando claras mejoras seis horas después de comer los frutos secos".