Debate interno en el PP ante los planes de Feijóo de cambiar el sistema de primarias
Está decidido a acabar en el próximo congreso con la doble vuelta para elegir al líder del partido. Este cambio puede ser clave en una batalla a futuro entre Ayuso y Moreno, aunque Sol de momento prefiere no posicionarse públicamente.

La celebración del Congreso nacional del PP, previsto para los días 5 y 6 de julio en Madrid, sigue levantando ampollas dentro del partido. Después de que Feijóo enfadara a parte de su comité de dirección por haber ocultado su convocatoria durante meses, sus planes ahora de acabar con las primarias como método para elegir al presidente de la formación han abierto otro pulso interno.
Según ha podido saber El HuffPost, Feijóo está decidido a acabar con el método de la doble vuelta que Rajoy instauró en 2017. En el congreso de este verano, habrá una ponencia en ese sentido avalada por Génova.
El líder de los populares ya dejó caer sus intenciones este martes durante una charla en el Consejo General de Economistas. "Vamos a intentar profundizar en la democracia interna (...) "Creo que hay un nudo gordiano ahí que tenemos que resolver. Es un poco raro explicar que todos los militantes pueden votar, pero la votación de esos militantes pueda quedar anulada por una segunda votación de los compromisarios"", ha asegurado.
Actualmente, el PP elige a su presidente en un proceso de primarias a dos vueltas. En una primera ronda los afiliados al corriente de pago de sus cuotas votan al candidato a la presidencia del partido y también a los compromisarios que participarán en el congreso. Si uno de los candidatos logra el 50% de los votos y una ventaja de al menos 15 puntos sobre el segundo, se proclama candidato directo. Si no es así, los dos más votados pasan a la segunda vuelta. Esta nueva ronda se celebra en el congreso y ya son sólo los compromisarios los que votan, de tal manera que estos pueden votar al candidato que no haya resultado ganador en la primera ronda. Algo que es, precisamente, lo que ocurrió en 2018 cuando la exvicepresidenta Sáenz de Santamaría ganó en primera vuelta pero luego Pablo Casado logró imponerse en el congreso gracias al voto de los compromisarios.
Lo cierto es que la actual dirección del PP considera “un error” que se puedan presentar tantos candidatos o que se dé la paradoja de que los afiliados voten a un candidato y los compromisarios a otro. De ahí que Feijóo quiera rescatar el modelo antiguo con alguna posible modificación, pero dejando de lado las primarias.
En marzo de 2022, durante una entrevista en el diario El Mundo, Feijóo ya dejó clara su posición: "Creo en las primarias a través de compromisarios, no en las primarias asamblearias. Los militantes eligen a los compromisarios, y éstos tienen la responsabilidad de elegir entre los candidatos. No puede ser que cualquiera se presente con 100 avales a presidir el Partido Popular de España".
Barones admiten en privado que esta estrategia de Feijóo, de facto, persigue recuperar el control del aparato del sistema de elección, algo que con la designación de Pablo Casado quedó en evidencia.

Dentro del partido, sin embargo, hay discrepancias sobre si resulta conveniente eliminar la ronda de primarias. La lectura que algunos hacen es simple: sin la variante de los afiliados, los compromisarios reciben órdenes de las estructuras territoriales. Es decir, los barones mandarían en el partido. Y cuando termine la etapa de Feijoo, en el PP creen que Juanma Moreno podría salir beneficiado de este sistema en detrimento de Isabel Díaz Ayuso. De hecho, el PP de Madrid dice que su líder “tiene ganada la calle” y “levanta pasiones entre los simpatizantes", frente al control de estructuras.
Este martes, Ayuso evitaba pronunciarse sobre los planes de Feijóo. "Lo que pase en el partido, se queda en el partido, como en Las Vegas", dijo. Su equipo prefiere no entrar de lleno en esta cuestión por ahora, lo que también implica que no respaldan expresamente la propuesta. Saben que un cambio de las reglas de juego podría ser clave en una batalla a futuro entre Ayuso y Moreno por la presidencia del partido.
El presidente andaluz, que saldría teóricamente beneficiado del cambio, sí manifestó este martes públicamente su deseo de revisar el modelo de primarias implantado en 2017, un sistema que "no está en la propia cultura de nuestro propio partido". "Lo que hay que buscar es una fórmula que sea justa, democrática, pero que no sea compleja y que no genere tensiones internas innecesarias", ha afirmado.
Y en mitad de esta discusión, Génova sigue sin llamar al ganador de aquellas primeras primarias, que fue Pablo Casado, para su participación en el congreso de julio. José María Aznar y Mariano Rajoy ya han confirmado asistencia.